Diagrama de condiciones de trabajo en sitio

Resistencia a altas temperaturas

Las válvulas Covna están fabricadas con materiales resistentes a altas temperaturas, lo que garantiza un funcionamiento estable incluso en entornos de calor extremo, como los que se encuentran en los procesos de incineración de residuos. La temperatura en los incineradores puede alcanzar hasta 800 °C y las válvulas Covna pueden soportar estas altas temperaturas, lo que garantiza que el sistema funcione de forma segura y eficiente y, al mismo tiempo, reduce la frecuencia de las reparaciones y el tiempo de inactividad.

Resistencia a la corrosión

El proceso de incineración de residuos genera diversos gases corrosivos como cloruros y compuestos ácidos. Las válvulas Covna utilizan acero inoxidable avanzado y materiales de aleación que ofrecen una resistencia superior a la corrosión. En aplicaciones del mundo real, las válvulas Covna duran un 50% más que las válvulas tradicionales en estos entornos hostiles, lo que reduce la frecuencia de reemplazo y los costos de mantenimiento. La construcción Hastelloy C-276, el cumplimiento de NACE MR0175 y los recubrimientos con rociado térmico resisten gases de combustión ácidos a 800 °C y abrasión de partículas.

Alto rendimiento de sellado

En la incineración de residuos, las válvulas deben mantener un nivel extremadamente alto de sellado debido a la combinación de alta temperatura, alta presión y condiciones duras. Las válvulas Covna están diseñadas con un alto rendimiento de sellado, lo que garantiza cero fugas tanto en entornos de alta presión como de vacío. Las pruebas muestran que las válvulas Covna superan los estándares de sellado de la industria en más del 30 %, previniendo eficazmente fugas de gas nocivas y garantizando la seguridad de la producción.

Facilidad de mantenimiento

Las válvulas Covna están diseñadas para ser simples, fáciles de desmontar y limpiar, lo que reduce las necesidades de mantenimiento y el tiempo de inactividad. En las instalaciones de incineración de residuos, minimizar los costos de mantenimiento es clave para mejorar la eficiencia general. El diseño modular de las válvulas Covna hace que el diagnóstico de fallas y el reemplazo de piezas sean más eficientes, lo que reduce el tiempo de inactividad en un 40 % y aumenta la productividad general. Los sellos autolubricantes y las conexiones sin bridas reducen los intervalos de mantenimiento en un 60 % en entornos con alto contenido de cenizas.

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